lunes, 22 de noviembre de 2010

El puente se rompió


Sentada mirando la nada. Es tan fácil y tan complicado.
Siempre voy por el camino equivocado, volviéndome pequeña,
luchando contra lo imposible y sigo.

Miro como tu amor se disuelve con la primera bocanada de aire.
Regalás sólo un puñado de melodías enojadas y rimas ácidas.
Me das un latigazo en las piernas, que me impiden caminar. Y sigo...

Tratando de tragar la angustia, la tristeza y el veneno que brota a borbotones,
que me defiende, pero es tanto que me ahoga y me envuelve.
Aparece la nostalgia de esos viejos tiempos de tranquilidad,
donde zambullida en la oscuridad del desamor,
acariciaba la esperanza de conquistar al hombre equivocado,
ese que nunca merecería.
Tranquilidad que perdí, sonrisas que se esfumaron,
deseos que permanecen pero me atan la soga al cuello,
me falta el aire de tanto sentimiento y busco la salida pero no encuentro el picaporte.

El puente se rompió, no puedo salir, se apagó la luz y no veo nada,
Tanteo y tanteo pero no me guío, pierdo el equilibrio.
No tengo norte, no tengo sur, perdí la dirección
y solo me queda el recuerdo hecho trizas de ese sueño que alguna vez tuvimos,
pero que no existe ¿o es mudo?, ya no se.

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